El chat

Todos tenemos mil grupos de chat: de amigos,  no tan amigos, de conocidos, casi desconocidos, del parque, del otro parque, de vecinos del edificio, del colegio  (ufff: chat solo de chicas, mixto, mi grupito, mi otro grupito, las pinkies, las queens, las reinas, las brujas, las teens, las ladies, las achoris, las bravas,  las mamacitas, etc, etc.), del trabajo,  otro ufffff: de un curso, del otro curso, de una facultad, de la otra,  con las que me llevo bien, con las que me llevo mejor, con todas las coleguitas, con jefes, con alumnos, con coordinadores, con secretarias, con exalumnos, etc.
De la familia: de hermanas, todos los hermanos, de primos, primos hermanos, de tíos; de mis hijos, de sobrinos, de cuñados, de tíos políticos.
Del colegio de mi enana: el grupo de primer grado, el de segundo, el de tercero y se irá ampliando  hasta  quinto de media!
De amigos de la infancia, de compañeros de la universidad, de mejores amigos de la universidad. Estos son mis grupos de chat, sin contar los whatsapp individuales. Imagino que todos andamos por lo mismo: grupos más, grupos menos.
La mayoría de mis amigas ha configurado su wsp de manera que no salgan las benditas rayitas azules, "así no sabrán si estás conectada, pues", me explicó una de ellas  (nunca entendí ese problema de que me vean o no conectada; hablo con quien quiero, cuando quiero y si no me contestan, piña mutua!).
Por el bendito chat pasa de todo como en botica: desde toda la calatería con las mil poses inimaginables hasta  cadenas con oraciones y plegarias de lo más piadosas, mandados muchas veces por las mismas personas, hecho que me asombra y perturba un poquito..
Algunos de los chats me relajan tremendamente, porque lo único serio que escribimos es "hola" y " chau" , luego nuestras conversaciones y GIFs son de lo más bobos. Los hay, más serios: con consejos y recetas caseras (para adelgazar, para la piel, para el matrimonio, para el trabajo, para los hijos, para un nuevo look).
Recordamos, con fotos que se volvieron reliquias y que gracias al whatsapp podemos editar, sacando a quien nos caía mal, y luego compartirlas, para asi revivir bellos momentos que, a veces, la retina del ojo no puede conservar.
Querido whatsapp , qué haría sin tí!!