El jefe que te toca
Un
comentario tomado al azar, me dejó pensando: “muchos peruanos, que llegan a
posiciones de poder, no saben ser buenos jefes. En mi país no sucede lo mismo”.
Dicho por un extranjero, me hizo notar, con pena, que muchas veces, es cierto.
Lo podemos ver en esta coyuntura política, ocasionada directamente, por nuestros Padres de la Patria. Demás está mencionar todo el caos que estamos viviendo, como si la pandemia, fuese poquita cosa y necesitáramos más preocupaciones.
Las
jefaturas, en cualquier área de empresa o de Estado, deben caer en manos correctas.
Lamentablemente, no siempre es así pues
en nuestro país existe mucho compadrazgo, muchos intereses subalternos creados,
muchos pagos de favores y no siempre prima el aspecto 100% profesional o el
amor a tu país que debe existir cuando se necesita un JEFE, con todas sus
letras.
Si alguna de las opciones que te menciono a continuación, no calza con tu jefe, intenta buscar nuevos horizontes; no te arrepentirás.
Para
mí, hay dos cualidades esenciales, no sólo para ejercer una jefatura sino para
tu vida misma: HONESTIDAD Y EMPATÍA.
Con
estos dos sustantivos, estás sacando de tu lista imaginaria a varios
jefes, ¿no?
Tu jefe
debe felicitarte por tus cumplimientos de objetivos y no estar ahí solo para “chancarte”
cuando algo no sale bien.
Un buen jefe
debe mostrar aprecio: ese aliento y halago hará sentir bien al subordinado y
éste tratará de mejorar cada día.
En la actualidad, todas las empresas buscan el famoso TEAM WORK, pues
bien, esa característica debe primar y ser impulsada por tu jefe, siendo equitativo
y justo, al momento de organizar el trabajo en la oficina. Hablando de TRABAJO EN EQUIPO,
éste será eficiente, productivo y feliz, tanto como lo sea su líder. Ahí radica
el problema en muchas empresas nacionales: existen muchos jefes que no calzan
en ninguno de esos casilleros. No son eficientes, y llegaron al cargo por algún
misterioso “bonus track”; no son tan productivos en la cancha, aunque en el
papel sean unos pulpos (¿han notado que en muchas empresas, llegado el momento
de listar los manuales de funciones del
personal, ¡resulta que todo lo hace tu jefe!?) Y, la característica más
importante: SER FELIZ. Y justamente, en este punto, salen jalados muchos
jefecitos.
Saberte feliz porque haces lo que debes, porque eres
honesto, porque tratas de no hacer daño, porque ayudas a tu prójimo,
porque tu vida tiene el rumbo correcto, que te permite caminar con la frente
en alto. Porque sabes que no “tienes rabo de paja” y no le debes “favores
especiales” a nadie. Porque puedes despertarte cada mañana sabiendo que el día
anterior actuaste con justicia, honestidad y probidad.
En el medio, tenemos muchas empresas que se encargan
de ayudarte a crear o mejorar tu cultura corporativa, si el hecho de tener
empleados contentos te importa alguito y yo creo que a las grandes cabezas
debería interesarles que los que están abajo se encuentren siquiera
medianamente satisfechos de la compañía en la que pasan muchos años de sus
vidas. Tener a un empleado contento y motivado, aumentará su productividad y
esto redundará en beneficio directo de la empresa.
Jefe, ayúdame a que cada situación signifique una oportunidad
de aprender. Toda la vida aprendemos algo, quien no lo hace, se queda rezagado,
no sólo laboral, sino vitalmente.
Conversa, comunícate. Para esto es
importante hablar primero con tu yo interior, entonces, antes de ser
inteligente interpersonalmente, debes serlo intrapersonalmente. Más clarito: si
sientes que tu vida es caótica y desordenada; si no sabes medirte al hacer tu
autoanálisis o - lo que es peor- si no te gusta lo que ves o cómo te ves,
estamos en problemas porque si tus emociones no cuajan del todo, no serás capaz
de tomar buenas decisiones. Si no tienes autoconfianza, automotivación, si no
puedes entenderte ni explicarte, no podrás hacerlo con el resto de manera
adecuada, es decir, no serás capaz de
establecer buenas relaciones con otras
personas.
Debe existir un justo balance entre tu trabajo y tu
vida personal.
Si no te inspiras tú mismo, no podrás inspirar a los
demás.
Si no eres apasionado con tu empresa, no podrás
involucrar de manera óptima al resto.
Más que un
jefe, sé mi mentor. No me estés diciendo qué hacer, si no muéstrame cómo debo
hacerlo.
Así como
todos tenemos algún maestro que nos inspiró y nos sirvió de ejemplo, recordemos
a ese buen jefe que nos hizo regresar a casa, felices.
Linda reflexión. La pregunta es donde está ese jefe ideal que todo necesitamos? Lamentablemente muchos llegan a cargos sin capacidades ni atributos. Yo me considero la excepción y me alegro haber formado grandes profesionales
ResponderEliminarDonde firmo
ResponderEliminarSi todos los jefes priorizaran la empatia y la asertividad la realidad y el progreso sería otro. Los buenos jefes que buscan la felicidad de su equipo son contados con los dedos. Buen tema!
ResponderEliminarSon los jefes de medio Perú
ResponderEliminarLa nueva realidad laboral, para los que hacemos trabajo remoto y "somos" parte de un "teem work", es el gran "examen' para muchos jefes, un desafío que pocos conocen cómo asumir o, que simplemente se les hace tedioso y complica más aún sus días. La empatía, en su significado más amplio: una "buena comunicación" através de una cánara, un frío chat que deja a nuestra imaginación el tono de las 'indicaciones", es para mí, una de las causas del trabajo sin horario. Buen tema!
ResponderEliminarPerfecta asociación de nuestros jefes de gobierno y los de la oficina.
ResponderEliminarAsí es querida Rochi. Esto pasa en países donde la escasa o ineficiente Educación Básica o la precaria formación familiar ha fallado en formar ciudadanos con valores. El respeto, la consideración, la empatía, el civismo, son conductas raras, que muchas veces son sujeto Dr expresiones de extrañeza y hasta menosprecio por aquellos que se sienten "superiores". Hasta que la vida y el Señor nos permita estar frente a un grupo de jóvenes, en forma presencial o virtual, tendremos que predicar estos vslores, con amor, paciencia, entusiasmo, peto sobretodo con el EJEMPLO.... Y cuando las circunstancias nos devuelvan a la calle, también en ella, porque un docente no deja de serlo hasta que la vida se le va de las manos.
ResponderEliminarUn abrazo, mi cariño y gratitud eternas.
Buena reflexión sobre el ideal al que se aspira naturalmente. Desafortunadamente, el día a dia, las circunstancias particulares y la cultura predominantemente mercantilista de la interacción laboral nos juegan en contra.
ResponderEliminarLas empresas más exitosas del mundo lo tienen clarisimo, brindándole a sus empleados espacios de descanso, esparcimiento y sobretodo reconocimiento a sus logros, gran ejemplo de ello es Google. Coincido contigo en que la empatía es una de las principales características que debe tener quien lidera a un grupo humano, quizás es lo último en que piensan quienes los eligen para esos cargos...
ResponderEliminarBuen tema! Cuando los valores forman y estan presente en nuestra "genetica" como seres humanos no tiene q suceder esto.. lamentablemente nuestros valores como la etica, honestidad, integridad ... y puedo ennumerar mucho mas ... se ha perdido y somos pocos los q hacemos primar estos valores en lo laboral (enfocandome en el tema) ... Pocos son los lideres laborales lo q no es lo mismo ser" jefe" .
ResponderEliminarSe dice q cuando a pesar de todo tus esfuerzos en un lugar de trabajo no se florece hay q salir y darse la oportunidad de florecer y radiar en otro !! O buscar un sitio donde mas calienta el SOL !!! Abrazo my friend!!!
Nadie se da cuenta hasta que no le pasa.
ResponderEliminarEsperamos que llegue la madurez a todos para aplicar de la forma ideal en que nos dices. Me gusta la descripción ideal.
Buen comentario
ResponderEliminarHay jefes y jefes. Especialmente, los que mencionas, que llegan al cargo sin saber cómo, sin experiencia, sin grandes conocimientos y lo que es peor, sin valores ni ética profesional.
ResponderEliminarLas empresas que son guiadas por este tipo de gente, tarde o temprano, caen.
Hay líderes verdaderos.
Hay
Hola hola, muy buen tema. Aquí en México es lo mismo.... Hay jefes que por sus años en la empresa y su conocimiento llegan a los niveles de mando.... Hay unos que si tienen una educación superior (licenciados, ingenieros) y otros sólo el nivel prepa (secundaria). Por supuesto que los que tienen nivel superior llegan a ser gerentes, directores y los de prepa sólo pueden aspirar a jefaturas, coordinaciones, supervisores. Te cuento una anécdota de hace 30 años cuando recién llegué a México: un director Si no le parecía tu trabajo lo tiraba... A mí me tiró una presentación de indicadores al bote de basura!!! Luego me lo pidió y yo por supuesto le dije su vida y me fui.. al día siguiente el director general me dijo que era rebelde y que le debía respeto por qué esa persona era mi director... Le contesté si te tratan con respeto uno también respeta.. y me fui... Esa persona cambió y me dijo que nadie le había dicho lo que yo... Hoy en día es mi mejor amigo.
ResponderEliminarA veces por miedo no decimos las cosas y dejamos que nos falten el respeto pero si no las decimos esas personas seguirán creyendo que están bien. Hay formas de decir las cosas sin ser groseros y sin ofender.